El fin de semana recién pasado se realizó, en la laguna del Club de Aeromodelismo de Chile en Lampa, el Campeonato Nacional de vela radiocontrolada. En dos días se disputaron nada menos que 32 regatas, de las cuales 16 correspondieron a la clase 1 metro ULY y las restantes para la flota multiclase RG65 y Victoria.
La flota Victoria, con 4 barcos y que se vio muy disminuida respecto de los 6 observados el año pasado, estuvo representada por Jorge Ramírez quién con su experiencia ubica siempre a su Capuccino estándar en los puestos de avanzada, Paul Donarski con su Berlin redecorado con los colores del Mowgli que participa en la Portimao Global Ocean Race, a estas alturas muy confiable con las mejoras que ha recibido, Matías Solar en su Condorito, también estándar y que ya muestra importantes avances en navegación y finalmente quien habla, con un Coke consolidado en confiabilidad y desempeño pero su patrón estudiando desesperadamente las reglas de regata y las técnicas de trimado.
El día sábado comenzó la actividad muy temprano porque debían disputarse el máximo número de regatas para así dar espacio al día siguiente a una regada entrega de premios.
Inicialmente nuestros Vics partían en la misma línea con los RG65 generando un tráfico innecesario en la cancha con los consecuentes enredos con barcos de distintas clases y con objetivos y contrincantes diferentes. Dada su experiencia, Jorge aprovechaba esta circunstancia de maravillas llevándose 4 regatas seguidas. Yo solo había ganado la primera con mucha dificultad. La tensión era máxima, disponer de un juez profesional fue de veras un acierto, los protestos se sucedían.
En la quinta regata por una evitable distracción, tal vez producto del cansancio o por el intenso viento que hacía muy difícil maniobrar nuestros Vics, cuyos aparejos no están diseñados para estas intensidades, mi barco enreda el popel con el aparejo de un RG al no poder virar oportunamente. Como consecuencia de lo anterior no pude terminar dentro del tiempo y mi contrincante protestándome, debiendo comparecer al comité de regatas para dirimir una situación, que no debiera repetirse, entre barcos de distintas clases. Luego de esto se estableció un sistema diferido de partidas entre ambas clases de modo que transcurrido un minuto de la partida de la flota RG65 se largaba la flota Victoria.
Lo anterior provocó un cambio radical en las estrategias. El viento arreciaba y la tarea era resolver cómo maniobrar para trasluchar cuando uno decidiera hacerlo y no cuando el viento lo permitiera. Observé que el viento dentro de su intensidad no era constante y en momentos la escora disminuía un instante, me pareció que era ese mínimo instante el que había de aprovechar, si no lo hacía debía esperar a que se produjera nuevamente. El artilugio comenzó a dar resultados que se tradujeron en 5 primeros lugares consecutivos. Paul Donarski se mantenía expectante tomando segundos y terceros lugares en forma alternada.
El día domingo se disputaron 6 regatas para la clase con vientos bastante más suaves que el día anterior lo que permitió desarrollar mejores estrategias y asi repartir primeros lugares entre los tres primeros con llegadas muy ajustadas. Matías con notables progresos, llegó siempre muy cerca del grupo. Los resultados en detalle se pueden ver en http://www.cvrc.cl/.
En resumen, una gran experiencia para los cuatro patrones, con mucho trabajo, intercambio de experiencias entre los que participaron navegando y los nuevos timoneles que nos acompañaron. Quienes no asistieron se perdieron una gran experiencia.
También se vieron novedades como un nuevo Vic con aparejo ProSails (http://www.pro-sails.com/), lo probamos y hemos visto que promete buen desempeño luego de algunos ajustes técnicos que estuvimos discutiendo.
Finalmente les comento que en el marco de las Pichangas de los primeros domingos de cada mes, el próximo domingo 4 de enero de 2009 en Piedra Roja, nos visitará Zano Ballestín, tercero del ranking español de la clase Victoria. Con él podremos compartir experiencias, intercambiar ideas y por supuesto disputar un buen numero de entretenidas regatas. No falten.